Siestas frustradas... Felices siestas.

Puede sonar tan choto, pero la siesta es de esas cosas que son vitales si se comparten. Aunque a esta altura del año uno suda mucho... Y tiene que dormir poco tapado... Lo que en estos casos es un punto a favor. Y más si es con vos.

Aunque está largamente pospuesto y mucho más añorado, las siestas que vienen son una promesa... Lo prometo.

Es extraño que (si no se me cumple ya sé por qué...) a cada estrella fugaz del último mes le he pedido lo mismo... Sólo siestas... No son ni fiestas ni dinero, ni sexo (cosa en demasía extraña para mi). Sólo siestas con vos.

Y si la paloma lo predice, es porque así va a ser. Las cosas pasan por cosas y yo sigo espectante. Aunque haya que esperar con una botella y 6 vasos en la mochila, al rayo del sol, ardiente, implacable... Con medio sánguche de milanesa y mucho sueño... E inclusive así aguantar una, dos o más semanas! Las cosas buenas para los que las esperamos.
No es justicia, son simples ganas.

Cuando el sol se posa justo sobre nuestras cabezas y el calor es prácticamente infernal, justo cuando nos hemos convertido en unas criaturas apelmazadas y lerdas... Cuando el hambre es vencido rotúndamente por el aburrimiento, justo ahí es cuando más hermosa te ponés...

Sólo quiero dormir con una persona así de hermosa.